Los obstáculos esta vez fueron LA FRONTERA VILLAZÓN - LA QUIACA: tres horas parados junto a nuestros compañeritos de viaje, algunos de los cuales tuvieron problemitas por los que el micro no podía continuar; UN CONTROL EN JUJUY: dos horitas más hasta que nos "atendieron" y revisaron los bolsos de los colegas bolivianos. Habian pasado ya 6 horas y no habiamos llegado a S. S. de Jujuy; UN PROBLEMITA DE PERDIDA DE ACEITE DEL MICRO: era un problema menor, solucianable en escasos 15 minutos. El problema fue que el Señor mecánico tardó en llegar algo asi comoooo.... 5 horas?? Desde las 18 hs hasta las 23 esperando en una estacion de servicio en Salta; y por último, UN TRANSBORDO: cambiamos de micro a mitad de la noche porque el nuestro estaba sano y la empresa lo necesitaba para llegar a Villazón. A cambio nos dieron un micro que habia estado parado durante 12 hs. En fin, dos horitas más para el contador de tiempo perdido.
Cuestión, tardamos 36 horas en llegar y encima no pasaron "Comando", que la tenían en dvd.
La cumbia, la azafata, la comida y nosotros mismos ayudaron a espantar a los fantasmas del suicidio en masa, quienes se quisieron apoderar de nuestro temple y de nuestra alegría y buena onda.
Potosí Buses debería saber que un almuerzo gratis no satisface nuestra necesidad de venganza, y que se necesita más que un trasbordo para arruinar a estos Tres pequeños Pájaros, que en todo momento predican el "Every little thing is gonna be allright". Gracias Bob.
No hay comentarios:
Publicar un comentario